La vaca de la economía
española está flaca, muy flaca y cada vez que busca en el prado
yermo de la reactivación un manojo de brotes verdes que poder rumiar
tranquilamente no halla más que briznas de hierba reseca. Los
granjeros, que ya no saben qué hacer para vender al público que ese
saco de huesos famélico engorda a ojos vista, tienen, en una de sus
sesudas reuniones, una idea fantástica: informar que la vaca coge
peso porque se prostituye y se droga.
Hasta la fecha, el
cálculo del Producto Interior Bruto (PIB) de España no imputaba en
sus balanzas contables dos actividades tan extendidas en el conjunto
de la sociedad como ilegales como son la prostitución y esas
sustancias estupefacientes que ni se recetan ni se venden en farmacia
legal, algo que ha cambiado en este último curso. La incidencia de
ambas en el cómputo global del PIB es residual, casi imperceptible,
suponiendo apenas un 0,87% de un total de 1,049 billones de euros,
pero que, por otra parte, no dejan de ser dos negocios que mueven
cerca de 9.000 millones de euros al año.
De este modo, y añadiendo
a la dieta de la vaca algún que otro elemento reconsiderado
inversión en lugar de gasto, como es el caso de las partidas
militares o de I+D+i, casi todos los granjeros sacan pecho porque la
res que cuidan, su PIB, ha engordado un 2,6% más. Y lo mejor de
todo, también le han comido terreno al déficit y a la deuda
pública, según recoge la siguiente noticia del diario DEIA
Sólo el granjero
económico, el granjero Luis de Guindos, no acaba de ver claro que el
engorde de la vaca esté siendo tan espectacular como el granjero
jefe, Rajoy, proclama a los cuatro vientos. Sí, gana peso, pero poco
a poco y, a su parecer, todavía se necesita aún abonar mucho el
prado con 'compost de reformas' para que la vaca pueda alimentarse
bien y su aumento de peso sea todo lo fluido que debería ser.
Quizás por eso, para que
la vaca tenga hierba que llevarse a la boca, lanzo al Gobierno una
idea de eslogan que puede hacer suyo con el objetivo de reactivar un
poco más la economía y elevar el PIB en unos cuantos puntos.
Se trata de adaptar una
conocida canción:
'Juan sígueme, vámonos de putas....Juan sígueme tu gasto el PIB imputa, Juan
Sígueeeemeeeee....
No puede ser, lo gasté
en drogas, no puede ser, lo gasté en drogas, no puede seeeer...Eso
da igual, las drogas también cuentan, eso da igual, las drogas
también cuentan, eeeeeso da iguaaal....'
Porque amigos, si el país
lo necesita, si el Gobierno lo necesita, quiénes somos nosotros para
decir que no. Así que ya sabéis, a drogaros y a ir mucho de putas
para que en el próximo informe del Instituto Nacional de Estadística
(INE) el PIB español haya crecido en puntos porcentuales tanto como
en centímetros los penes de los abnegados patriotas dispuestos a
vaciarse por la causa.