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viernes, 4 de noviembre de 2011

¿Circo electoral con 5 millones de enanos? Quiero un Míster Presidenciable, !ya¡

Hoy tenía pensado hablar de “Los Pichones”, un reality en el que el público dirime a golpe de voto qué pareja de las participantes es más depravada en sus prácticas sexuales. Pero la actualidad manda y antes que esta suerte de Gran Hermano no mucho más obsceno que su hermano pequeño, un tema más candente ocupa la palestra: desde hoy viernes 4 y hasta el próximo día 18 de noviembre España se viste de largo para disfrutar de las actuaciones de los integrantes del fantástico Circo Electoral y su jardín con 5 millones de enanos, todos igual o más parados que sus colegas de cerámica.

Habrá de todo, payasos, malabaristas, domadores.. lo que haga falta para devolver la ilusión y la confianza del espectador en la figura del mago reconvertido a jardinero que hará florecer los brotes verdes. Una tarea ardua en los tiempos que corren, sin lugar a dudas. Eso sí, pase lo que pase, no me cabe la menor duda que sí serán capaces de poner una sonrisa en la boca de todos los votantes.

¿O acaso creéis que alguien podrá evitar sonreír, reír e incluso troncharse de la risa con algunas de las muchas promesas electorales que en estos días se van a dejar oír? Un buen montaje con ellas y ya tenemos un programa de humor capaz de competir con La hora de José Mota.

En mi modesta opinión, la victoria de los populares es un hecho casi consumado. La gente está muy cansada del actual Ejecutivo y ve en un cambio de tercio el mejor del menor de los males, por lo que despilfarrar millones de euros en ir de un sitio a otro para montar la carpa del Circo Electoral y entretener durante unas horas a los asistentes con malabarismos dialécticos, bufonadas varias, etc... lo considero una pérdida de tiempo.

Eso sin tener en cuenta que creo que nos encontramos ante los dos candidatos presidenciales de los dos principales partidos, PP y PSOE, con menos carisma de nuestra no muy extensa todavía vida democrática reciente.

Porque si Alfredo Rubalcaba transmite la misma pasión que el director de una película introspectiva y de búsqueda del sentido de la vida iraní y su semblante invita a pensar que, de ser un superhéroe, su poder sería el de dormirte con su palabra, Mariano Rajoy, no se queda atrás. Siempre con cara de no saber dónde está, como la de un besugo al que han sacado fuera del agua y con su fino arte de no decir nada.

Y lo peor es que ambos han aceptado un cara a cara televisado. Y que lo veré. Y que con suerte no me dormiré cuando Rubalcaba utilice su ataque somnífero. Y que cuando acaben, tendré la misma cara de tonto que cuando empezó y la misma sensación de que pintar rayas negras a un burro no lo convierte en un tigre, que sigue siendo un burro. Es decir, más de lo mismo, pero con distinta cara.

Por eso creo que para las próximas elecciones, PP y PSOE deberían pactar con Telecinco y Ansón y, cada uno en sus respectivos partidos políticos, celebrar la gala de Míster y Miss Presidenciable, donde elegir, de entre todas las Comunidades Autónomas, al estilo de Miss España, al futuro aspirante a la presidencia. A ver si de una vez por todas encontramos a nuestro Kennedy u Obama. Y si no, por lo menos, que nos hagan algo más divertida la campaña electoral.

Porque ver a Mariano Rajoy, como Míster Galicia, o a Alfredo Rubalcaba, como Míster Cantabria, desfilando primero en bañador, turbo, nada de Bermuda (hay que honrar la figura de Macho Ibérico que tanto ayudó a construir Alfredo Landa) y después en traje largo de noche, haría más llevadero el interminable sonsonete de discursos y actos de una campaña electoral.